lunes, 25 de junio de 2007

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El órgano de la Iglesia de Guayacán

A continuación reproducimos un estracto del artículo publicado por el periodista Felipe Alamos del diario El Mercurio en su blog sobre el patrimonio, donde se refiere al órgano de nuestra Iglesia:


...Guayacán, un pueblito hoy absorbido por Coquimbo que hoy lucha por mantener su identidad. Llegué a esta iglesia en busca de respuestas que tenían sin duda más que ver con la curiosidad que con la fe. Estaba intrigado por el origen de la fachada de zinc de la iglesia de la Hacienda El Sobrante, en Petorca, y como mi abuelo no me pudo responder a mis inquietudes, salí a buscar la respuesta. Este verano estuve en Traiguén, Lumaco, Mulchén y alrededores (VIII y IX regiones). Luego, mi vista apuntó hacia Coquimbo. Todavía no resuelvo el misterio.Claro que la humilde capilla del fundo familiar, palidece ante esta increíble muestra de la mejor ingeniería de XIX.Esta auténtico mecano está hecho de planchas de zinc estampadas en Bélgica, apernadas con precisión industrial. Fachada e interiores son iguales, lo cual confiere a la obra una fría armonía, que sólo pudo ser destruida por una serie de adefesios instalados por el padre Juan Van Hacke.Conversando con Rodrigo, cae el primer mito de mi visita. La iglesia no es de Eiffel, sino que fue concebida en Bélgica y llegó por mar en el vapor alemán Biancas en octubre de 1889, que traía desde Amberes cerca de 400 bultos con planchas metálicas. A fines del mismo año, se instaló la iglesia.Claro que hay otros mitos que sí subsisten. Por ejemplo, que la torre original cayó desde el barco y que la que hoy existe fue fabricada en Guayacán. Como también lo fueron las campanas, fundidas en las maestranzas de Maximiano Errázuriz, el magnate dueño de la capilla y de todo Guayacán.

Como soy amante de los detalles lo que más me llamó la atención fue el órgano de la iglesia, una joya escondida que muy poca gente sabe es el órgano construido hacia 1870 por la firma inglesa Van Gruisen, de Liverpool. Pura precisión británica.